Marius Schober

Embracing the Mysteries, Unveiling the Realities

Dividendos para el inversor de valor: ¿Es bueno tenerlos o son necesarios?

Un análisis de las acciones que pagan dividendos frente a las que no los pagan

Esta es mi tesis de licenciatura que presenté en diciembre de 2017 en la Universidad de Ciencias Aplicadas del Rin-Waal. Responde parcialmente a la pregunta de cuán importantes y relevantes son los dividendos para el inversor en valor. Decidí publicar la tesis como acceso abierto en 2022 Creo que las conclusiones de mi estudio pueden ayudar a los inversores a luchar contra la inflación y lograr un rendimiento superior a la media en los próximos 2-6 años.

A partir del 18 de junio de 2022, estoy editando, actualizando y reescribiendo la tesis para publicar un libro electrónico en inglés más actualizado y legible lo antes posible. Si te interesa este libro, puedes suscribirte a mi boletín de noticias, para que te enteres primero. 

Resumen: Durante las décadas anteriores, la investigación ha demostrado que las acciones de valor superan a las de crecimiento, así como al mercado en general. Si bien las investigaciones contradictorias demostraron que los dividendos pueden tener un impacto en la rentabilidad general del inversor, ningún estudio analizó específicamente el efecto de los dividendos en el ámbito de la inversión en valor. Este estudio cierra la brecha científica y examina la importancia de los dividendos para el inversor en valor, analizando el rendimiento de las acciones de valor que pagan un dividendo significativo o que no pagan ningún dividendo, al tiempo que proporciona los antecedentes teóricos necesarios. Los resultados aportan pruebas, para el S&P 500 y el Stoxx Europe 600, de que las carteras de valores que no pagan dividendos con un P/B bajo superan, por término medio, a las carteras de valores que pagan dividendos con un P/B bajo, así como a la cartera de valor global de la que forman parte. Las acciones de valor que pagan dividendos significativos ofrecen la mejor rentabilidad ajustada al riesgo para el inversor estadounidense, mientras que las acciones de valor que no pagan dividendos son la mejor opción para el inversor europeo. En definitiva, mantener o incluir acciones que no pagan dividendos en la cartera de valor puede optimizar significativamente los rendimientos de la inversión de los inversores en valor en Europa y Estados Unidos.